Novedades

,

La transformación digital en el mercado laboral

Por la transformación digital, ¿es el fin de la mitad de puestos de trabajo tal y como los conocemos actualmente?

Computadoras, robots, inteligencia artificial… ¿Nos estamos adentrando en una nueva era capaz de transformar la sociedad y el mercado laboral? Muchas de estas transformaciones no son nuevas. Ya han influenciado de forma directa nuestras tendencias de consumo y nuestra vida diaria.

Era cuestión de tiempo para que la digitalización diese el salto al mercado laboral, como ya ha pasado con la aparición de posiciones de reciente creación como Product Manager, App Developer o Community Manager. Hoy están a la orden del día, pero hace diez años ni siquiera existían.

Lejos de quedarse ahí, la transformación digital pisa más fuerte que nunca y ocasionará en el futuro profundas consecuencias en las empresas, la economía y la sociedad.

Entendiendo la transformación digital

Hace poco más de 200 años era la Revolución Industrial la que ocasionaba grandes cambios económicos, sociales y tecnológicos; ahora es el turno de lo que los expertos llaman la “Cuarta Revolución Industrial”.

Tras la irrupción de la informática e Internet en los hogares y en los espacios de trabajo en los años ochenta, la digitalización ha ido avanzando hasta convertirse hoy en la estrategia central de start-ups y multinacionales.

Multitud de empresas han integrado las nuevas tecnologías en su estrategia de negocio para responder a las necesidades de los consumidores de manera más eficaz. Desde la implementación de la banca online hasta agencias de viajes o editoriales sustituidas por simples webs o apps.

Por otra parte, también hemos visto nacer a empresas nativas digitales como Uber, cuya aplicación móvil conecta a pasajeros con conductores, PayPal, que ofrece sencillas soluciones de pago on line, o la tan popular Airbnb.

Las consecuencias de la Transformación Digital para las empresas

Los datos demuestran que las empresas que apuestan por la digitalización logran aumentar su cifra de negocio y optimizar sus costes. Es más, en el caso de España, un estudio de Siemens estima que la Transformación Digital elevará el producto interior bruto en 120.000 millones de euros en 2025.

Lograr la digitalización de las empresas implica para estas la posibilidad de mejorar la experiencia del cliente, aumentar su grado de visibilidad, impacto y conversión, la reducción de costes en estructuras obsoletas o hasta el incremento del nivel de satisfacción de los trabajadores. Es por esto que muchas compañías ya han apostado por la Industria 4.0. De hecho, la financiación de proyectos en Inteligencia Artificial se ha multiplicado por 8,5 veces desde 2012.

Pero todo avance tecnológico siempre tiene una cara B. Con la digitalización y la automatización de las empresas, muchos trabajadores serán reemplazados por robots, destruyéndose miles de cientos de empleos. Pero, ¿se compensará esta pérdida con la aparición de nuevos puestos de trabajo? ¿Qué trabajos son más susceptibles de desaparecer? ¿Cuáles corren menos riesgo?

Es tal el debate y la preocupación que, en mayo de 2016, el desarrollador Mubashar Iqbal y el diseñador gráfico Dimitar Raykov crearon una página web para calcular la probabilidad que hay de que tu trabajo se vea perjudicado por la automatización. Es tan sencillo como escribir tu profesión y seleccionarla en una lista de trabajos relacionados. La web, llamada Will robots take my job?, arroja datos contrastados basados en un estudio sobre automatización, publicado en 2013 por la Universidad de Oxford.

A pesar de que el estudio está enfocado en el mercado estadounidense, es fácil extrapolar los resultados a cualquier otra parte del mundo. Por ejemplo, trabajos como cajero, conductor o cartero corren un alto riesgo de desaparecer. Sin ir más lejos, ya se han creado coches autónomos sin conductores, o drones que te llevan los paquetes a la puerta de tu casa. Ahora, imaginate un supermercado sin cajeros. Existe. Amazon lo ha creado. Abrió sus puertas en enero de 2018.

En el extremo opuesto figuran profesiones como pediatras, dentistas, profesores, publicistas y escritores, con un riesgo nulo o muy bajo de ser reemplazadas por robots.
Todo apunta a que, frente a funciones rutinarias y que requieren perfiles menos exigentes, el factor humano sigue desempeñando un rol fundamental. Y es que, en el futuro, habilidades como la inteligencia social, entendida como habilidades de negociación, persuasión y comunicación, y la creatividad pasarán a ser más valiosas.

Los desafíos que plantea la Transformación Digital

Los avances tecnológicos están revolucionando el mercado laboral y no cabe duda de que, en unos años, todo lo que pueda ser automatizado se automatizará, y aquellos que no estén preparados para asumir la Transformación Digital verán mermadas sus oportunidades de desarrollo profesional. Es imprescindible que tanto empresas como trabajadores apuesten desde ya por la innovación tecnológica si no quieren quedarse atrás.

Las empresas deberían identificar las necesidades de sus consumidores, aumentar y mejorar su presencia digital si quieren obtener una ventaja competitiva frente a sus competidores. Los mayores retos a los que se enfrentarán pasan por implantar avances en materia de IoT, Big Data, Inteligencia Artificial y Ciberseguridad, entre otros. Las organizaciones tienen que ser capaces de ofrecer una buena experiencia a sus clientes a través de las herramientas que aporta la Transformación Digital, facilitando la gestión de determinadas tareas de manera automática, personalizada y en tiempo real.

Por esta razón, los directores y líderes de negocios no pueden desmarcarse del proceso digital. Es necesario que se involucren de manera activa y se digitalicen ellos mismos para poder abordar todos estos retos y encauzar su estrategia de empresa hacia el éxito. Además, es importante que fomenten la innovación en su propia plantilla, creando un entorno dinámico de participación y formación.

¿Y los trabajadores? Temerosos de que puedan perder su puesto, la reinvención de los trabajadores parece evidente. Reinventarse o morir, dirán algunos. No hace falta ser tan drástico, pero sí es necesario que los profesionales apuesten por su formación en competencias digitales y no tengan miedo a ser creativos. Precisamente la creatividad será una de las cualidades más valoradas por los profesionales de selección y las empresas en el futuro, junto con la capacidad de adaptación, el pensamiento crítico y la llamada inteligencia social. Las empresas valorarán perfiles multidisciplinares con habilidades de comunicación y que sean capaces de adaptarse rápidamente a los cambios y de trabajar tanto de forma autónoma como en equipo. Cuanto más valor añadido podamos aportar como profesionales, más imprescindibles seremos.

Se podría decir que, en el mundo 4.0, la clave para que, tanto empresas como trabajadores sean imprescindibles, es estar conectados, informados y formados.

 

Nota elaborada por el Licenciado Daniel M. Aisemberg. Docente de CAMEeducativ@

 

 

Deje un Comentario